domingo, 20 de noviembre de 2011


   Yo le preguntaba sin entender que quería de mí y ella, cada vez más cabreada, se ha decidido finalmente por pedirme el chupete por su nombre -bueno, algo así como "ete" señalándolo enérgicamente-. Con sólo casi un año y medio de edad ha descubierto que el lenguaje es la única forma efectiva de comunicación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario